Mendoza, principal productor de ciruelas del país, dio por finalizada su cosecha. Los datos de producción son verdaderamente alentadores, pero las quejas llegan por los precios que terminaron recibiendo los productores.

La mayor parte de los operadores consultados coinciden en señalar que la temporada 2023/24 llegó con más cantidad de materia prima, lo que terminó por presionar los precios a la baja.. Ahora las expectativas están puestas en la evolución que pueda llegar a tener el mercado.

Los productores señalan que la industria pagó un 22% menos de lo acordado. «Lo que tiene que ver con los precios es algo que concierne al sector privado. No todas las ciruelas se pueden pagar al mismo valor. Hay empresas que tienen la trayectoria o la habilidad que les permite pagar un mejor precio y otras que no. Algunas exportan y otras comercializan solamente en el mercado interno.

Este desfasaje entre el valor de la materia prima y lo que convalida el mercado termina perjudicando al productor. «Los productores más pequeños vienen atravesando muchas dificultades. Por un tema de economía, las cosechas de este sector no tienen el cuidado que el mismo productor desearía que tengan. Por ello, producen una ciruela de menor calibre que se paga mucho menos en el mercado. En muchos casos no llegan ni a cubrir los costos. Muchos productores primarios no alcanzan un equilibrio entre lo que producen y ganan.

Es un gran desafío para la Argentina retomar la función comercial que supo tener hace algunos años. El país llegó a producir y vender entre 30 mil y 40 mil toneladas de ciruela seca por año. Se exportaba a muchos países importantes como Brasil y Rusia. se debe volver a transitar por esa senda comercial que nos permita nuevamente posicionarnos en el mundo. Tenemos que recuperar el terreno perdido, hay que volver a darle el impulso necesario al sector. Estamos hablando de un producto que es muy buscado por el mundo.